Continuamos el relato de nuestra incursión en el corazón de Picos de Europa. Recordar que pasamos la noche en el refugio de los Cabrones y que al ser pequeño, capacidad para 20 personas en literas y bien arrejuntadas, pues dejan tiendas de campaña para que la gente pase la noche en los vivac aledaños al refugio y también utiliza el comedor como dormitorio, que es donde dormimos nosotros.
Nuestro objetivo era subir al Torrecerredo, techo de Asturias y de la Cordillera Cantábrica. Salimos del refugio poco antes de las 8, casi de los primeros. Tomamos el sendero que en una decena de metros pasa junto a la fuente que sirve para abastecer de agua al refugio y a sus visitantes, teniendo como referencia en todo momento el Pico de los Cabrones (2553 m) y su conjunto de agujas
Tras dejar atrás el Jou de los Cabrones, debemos entrar en una empinada rampa pedregosa que tiene su salida a la izquierda según el sentido de la marcha de las agujas del Pico de los Cabrones. Tiene traza de senda, pero nosotros nos acercamos lo más que podemos a la pared de la izquierda para tener mayor sensación de protección
Una vez alcanzada la salida, podemos contemplar lo empinado del tramo que acabamos de acometer
Una mirada más a lo lejos, hacia el este nos regala este mar de nubes
Seguimos aproximándonos a la base del Torrecerredo, habiendo dejado bastante atrás el Jou de los Cabrones, cominado por la estampa soleada del Cueto del Trave
En nuestro avance el Pico de los Cabrones se va a ir quedando a nuestra derecha. Es una montaña que en su vía normal está catalogada como AD inf., pero con pasos muy expuestos
Y por fin aparece ante nosotros la mole pétrea del Torrecerredo (2648 m)
Hay que atacarlo por su flanco izquierdo (oeste). Cruzamos un neverillo y tras este comienza el ascenso final
Desde el primer momento hay que trepar. Hay cierta exposición pero la sensación de patio aún no es exagerada. Vemos varios grupos que llevan material de escalada y los dejamos pasar para que vayan equipando los pasos tranquilamente
Llegamos a un punto hitado donde podemos darnos un respiro y disfrutar con la vistas de las torres circundantes. Allí dejaremos las mochilas, ya que tenemos que volver por el mismo sitio, y la subida adquiere ahora un compromiso donde es mejor ir sin peso a la espalda que nos pueda desequilibrar
Primero hay que salvar un paso corto de II+, pero no muy expuesto. El grupo que iba delante sí aseguró este punto
Posteriormente viene el tramo más expuesto de la subida, una rampa donde el más mínimo fallo o descuido te aboca a una caída mortal. Son continuos pasos de II, alguno de II+, fáciles y de los que hemos acometido multitud de veces en nuestras montañas del sur, pero Picos es otro mundo y aquí el desnivel se salva bruscamente, por lo que el patio que se abre a nuestros pies, hace que en este tramo nos bloqueemos y nos pensemos si seguir o no. De pronto empezamos a ver unos metros por encima nuestra a grupos que descienden de la cima y todos con cuerda y asegurados. Así que hablamos Abén y yo y decidimos abortar la subida. Nos hemos quedado a 25 metros de desnivel de la cumbre pero tuvimos dudas y en ese caso es mejor darse la vuelta. Eso sí para bajar hay que prestar mucha atención y cuidado. Descendemos arrastrándonos de espaldas con el culo bien pegado a la roca
Por fin salimos del zócalo rocoso de la rampa. Solo nos resta destrepar el paso del principio pero este, aunque quizá más técnico apenas es expuesto
Han sido unos momentos de tensión fuerte. Al llegar de nuevo a las mochilas en la base del Torrecerredo respiramos soltamos tensión y decidimos hacer las tres torres cercanas al Torrecerredo, que estaban también en el plan original, pero ahora con más ganas. Siempre que el terreno nos lo posibilite vamos a probar a subir los picos cercanos. Desde la base tomamos dirección sur bajo los escarpes de la Torre Bermeja. Junto a una gran roca dejamos de nuevo las mochilas y subimos a su cota norte
Abén en la cota norte de Torre Bermeja, con el Torrecerredo como vigía del lugar
Qué cerquita hemos tenido el techo de Asturias. Si se puede, otra vez será
Nos damos cuenta que la cota norte no es la más alta así que nos dirigimos hacia el punto más alto de la Torre Bermeja
Llegamos a la base de la cresta cimera. Este paso (II) es evitable por la derecha por donde luego regresaremos. Pero seguimos los pasos de un montañero local que nos comenta que está haciendo todos los picos, cotas y agujas de más de 2000 metros de Picos de Europa y que según nos cuenta son más de 300, llevando él más de 100. Anteriormente él y su compañero han subido al Torrecerredo siendo de los pocos que lo han hecho sin material en el día de hoy. Eso sí se desenvuelve como un rebeco por la zona
Al llegar arriba de la cresta el amigo Abén me hace un bonito retrato, por el paisaje claro
Y el montañero asturiano nos avisa y nos para a mitad de cresta para hacernos esta fotaca
Foto de cumbre (2606 m) con vistas a Torrecerredo
Y aquí con vistas al macizo occidental donde destaca la Peña Santa que con 2596 metros es la cumbre más alta de ese macizo conocido también como del Cornión
Aquí Abén observando plácidamente las primeras vistas que tenemos del legendario Pico Urriellu o Naranjo de Bulnes
Bajamos después de disfrutar de las grandísimas vistas hacia la collada Bermeja. Ya tenemos en frente la Torre Coello
Se observa claramente la arista por la que hay que subir. A la izquierda la Torre del Oso o Tiro del Oso
La subida es corta pero tiene su miga también, aunque por lo empinado y descompuesto del terreno porque apenas presenta dificultad técnica. Torre Bermeja, Torrecerredo, Risco St Saud y Torre Labruche como telón de fondo
Y una nueva cumbre. La Torre Coello se alza hasta los 2584 metros
Aquí los dos con el Naranjo de Bulnes a nuestras espaldas
Ahora resta seguir la cresta que une la Torre Coello con la Torre o Tiro del Oso, más bien este segundo nombre ya que el primero de Torre del Oso coincide con el nombre de otra montaña a las espaldas del Pico Urriellu
La cresta no presenta grandes dificultades (I+) pero exige mantener la concentración
Para buscar el paso clave de ataque a esta cima, hay que llegar al colladillo que separa las dos cumbres. Descendemos una decena de metros la empinada pedrera pegados a la derecha protegidos por la pared rocosa y encontramos esta diagonal que nos introduce en la parte culminante del ascenso
En todo momento Abén busca los mejores pasos, nada complicados, el más complicado una roca que hay que pasar encaramados a ella, pero como en todo el recorrido, expuestos, lo que nos hace ir con todos los sentidos bien despiertos
Y nuestra tercera cumbre del día (2576 m)
Torre Coello, Peña Santa al fondo, Torre Bermeja y Torrecerredo desde la cumbre del Tiro del Oso
Abén señalando al Picu Urriellu donde en estos días nuestros amigos Kafer y Anusca estarán realizando uno de sus sueños montañeros. Suerte amigos, desde aquí nos acordamos de vosotros
De vuelta a la pedrera toca bajar por ella, habiendo parado antes a comer, que apenas lo habíamos hecho durante el día. Como se puede ver no hay otra forma que hacerlo que no se a la del culing, si no quieres verte envuelto en un tropiezo donde vete a ver donde paras. Una gran piedra se desprendió durante nuestro descenso y parecía que no iba a parar nunca de bajar, lo que nos hizo apretar y pegar aún más el trasero al suelo
Por fin salimos a terreno claro y ya por senda nos dirigimos a la siguiente collada faldeando la pared norte de la Torre del Oso
Y por fin la ansiada Horcada de Don Carlos o Arenizas Altas (2422 m) Paramos a descansar, además de merecerlo lo necesitamos
Inmejorables vistas las que tenemos desde aquí del pico más mítico de la zona y quizás de toda nuestra geografía
Tras el descanso toca descender la Horcada por senda pero muy pronunciada ésta, buscando otra horcada, la de Caín
Poco a poco, las moles pétreas van quedando atrás
Llegamos así a la Horcada de Caín o Arenizas Baja (2342 m). Desde aquí vislumbramos este vallecido conocido como Hoyo Grande, en su parte más alta cimero y luego y más amplio el bajero
Atravesamos el Hoyo Grande Bajero
Vaya, pensábamos que ya era todo bajar. Tras esta corta subida, alcanzamos la Gargantada de Hoyo Grande
Y entramos así en la Canal de Dobresengos
Nos restan aún 1500 metros de desnivel de bajada
La bajada se hace larga y la niebla empieza a penetrar por la canal proveniente del Cares
Aunque las vistas y paisajes mitigan en cierta manera el acusado descenso, el dolor de pies y piernas y el cansancio
Tras pasar un bosquecillo de hayas, nos hacemos un lío porque no vemos claro bajar por este paso. Buscamos salida por otro lado, pero al final resulta que no hay más remedio que pasar por aquí. Es el paso conocido como El Canalón y el culing vuelve a ser técnica de descenso en algunos tramos del mismo
Bajamos con tensión, porque no sabemos si al final vamos a encontrar paso o no, y no queremos sorpresas en forma de cortado insalvable. Por suerte hay salida y echamos una mirada atrás. A posteriori y tras leer sobre la canal de Dobresengos descubrimos que los pastores traían por este paso al ganado
Ya sólo resta bajar hacia el arroyo de Casiellas y seguirlo hasta su desembocadura en la Garganta del Cares a escasamente un kilómetro de Caín, a la que llegamos pasadas las 21.30 horas. Por suerte nos han guardado la cena que habíamos reservado a pesar de llegar algo fuera del horario de cocina, lo cual agradecemos dando buena cuenta de la misma
Hoy han sido 14 horas en el monte, que unidas a las 12 del primer día dan idea de la paliza que nos metimos en estas dos jornadas. Mirando después los datos del GPS salieron más de 35 kilómetros y 3300 metros de desnivel acumulado
Mapa de la ruta
Perfil de la ruta
Enlace a wikiloc:
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=10530204
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