Tras dormir en el Hostal "El Refugio " en Navarredonda de Gredos, salimos en coche temprano hacia Navalperal de Tormes, donde se toma la pista que nos conduce al parking en el paraje conocido como Prao del Toro. Justamente allí comienza nuestra ruta, cruzando el puente sobre el caudaloso río Tormes.
En los primeros instantes pasamos junto a una majada de cabras
La pista se adentra en la sierra para cruzar las aguas de la Garganta de Gredos por el puente de Las Ranas
En un punto la pista gira en ascenso hacia la derecha, tomando nosotros el sendero que la abandona a la izquierda
Aunque el día está nublado y con mala visibilidad pronto aparece ante nosotros la mole de la Mogota del Cervunal
Cruzando las aguas de la Garganta del Pinar provenientes del circo de Cinco Lagunas, en e paraje conocido como Las Juntas, ya que en esa zona las aguas de esta garganta se unen con las que nacen en la zona de la Laguna Grande
Tras cruzar este llegamos a la bifurcación de los senderos. Por la izquierda a la Laguna Grande de Gredos y hacia la derecha a Cinco Lagunas. Nosotros optamos por tomar justo unos dos metros a la derecha de la señales un sendero que asciende por la cuerda de las Peñas
Tras superar una primera parte con abundante vegetación sobre todo de piornos, alcanzamos una zona más despejada. La temperatura no supera los 0 grados y de vez en cuando sopla algo el viento aunque de forma muy ligera lo que se agradece
A mitad de cuerda un abrevadero nos sirve para tomar un respiro y beber de sus frescas aguas
Decidimos no subir al Cerro de las Peñas (1819 m.) y lo bordeamos por el sendero de su izquierda donde encontramos los primeras acumulaciones de nieve
Desde aquí se obtienen amplias panorámicas; pena que el día esté nublado y la luz no sea la más idónea para obtener la belleza del lugar. La garganta de Gredos se adentra hacia las alturas culminantes de la sierra
La Mogota del Cervunal unas veces queda escondida entre las nubes y otras emerge; esa va a ser la dinámica durante gran parte de la jornada. La amplia llanura que nos lleva a su base se conoce como Prado del Cervunal
Al final de esta preciosa meseta y como punto de partida del ascenso en sí se halla el bonito y curioso refugio, que por su forma se conoce como Chozo del Cervunal, donde coincidimos con veteranos montañeros de la zona con los que compartimos charla y viandas. Nos aconsejan que hoy el día no está para subir, ya que además de la ventisca que puede soplar en las cercanías de la cumbre, es muy probable que nos encontremos con placas de hielo
Pero la estampa bella de la montaña y que parece que va a abrir (según las predicciones el mejor tiempo se anunciaba para después del mediodía) nos animan a intentarlo hasta por lo menos donde se pueda sin peligro. Son 600 metros de desnivel desde aquí
En esta primera parte los piornos son los que dificultan el avance, pero al encontrarse bastante tapados por la nieve se facilita el avance
Echamos una mirada atrás y vemos la Laguna del Cervunal, completamente helada. En esta panorámica se observan las huellas glaciares que miles y miles de años de acción han dejado plasmadas en este paraje
La pendiente se hace más acusada y hay que progresar más lentamente
Vemos el collado que tenemos que ganar antes de afrontar el último tramo de subida, pero las nubes no quieren dejar libre a la montaña; a la derecha del collado unos montículos de conglomerado granítico, zona conocida como El Novillero (2246 m.) que también se conocen como los Dos Hermanitos
Hacia uno de ellos nos dirigimos para hacer cumbre, pero a escasos metros de hollar su cima la nieve dura casi hielo con la inclinación que tiene y mi torpeza que hace que el piolet se me vaya 100 metros abajo hasta que se detiene, obligan a que desistamos de esta pequeña cumbre. Gracias a que Julio retrocede y me hace llegar de nuevo el piolet puedo salir de allí, y retomamos de nuevo dirección hacia la Mogota del Cervunal
Tras este momento complicado volvemos a disfrutar del paisaje
Parece que las nubes nos van a dar la oportunidad. El collado está al alcance. Allí nos encontramos a un grupo que desciende y que nos dicen que la nieve está en seguras condiciones y que vamos a tener suerte porque el día está abriendo. Apenas 45 minutos para hacer cima
Esta es la parte más dura por su inclinación. Asciendo lentamente y cada pocos pasos debo parar a tomar aire
La última pala exigente
En una parada para recuperar fuerzas echo vistas atrás hacia la zona del Novillero o Dos Hermanitos
Y hacia abajo a lo lejos la meseta donde se distinguen los prados del Cervunal y la laguna homónima
Llegando a la cumbre (por cierto es muy amplia y tiene dos cotas con hitos de piedra que marcan la máxima altitud, pero desde esta es de donde se obtienen las mejores vistas de todo Gredos) y somos afortunados, las nubes abandonan el lugar y tenemos unos minutos preciosos para disfrutar del paisaje aunque haga mucho frío
Impresionante estampa de la cuerda que sigue hasta el Portillo del Pluviómetro y la Portilla del Rey, con el pico Almanzor dominando al fondo
El Almanzor (2592 m.) y las cumbres aledañas imponentes
Hacia Cinco Lagunas
Zona más oriental del circo donde destacan el Risco Moreno, El Morezón y La Mira
Los Barrerones
Fotos de cumbre
Antes de abandonar la zona alta oteamos hacia occidente para seguir disfrutando del paisaje y en concreto de los paredones de los Cantos Colorados donde destaca la cima del Meapoco
Uniendo las distintas fotos desde la cumbre se obtienen unas espectaculares fotos panorámicas
Iniciamos el descenso con mucha precaución porque la nieve sigue estando dura
Mirada atras a esta bonita montaña. El sol va dejando paso a las sombras mientras se retira sosegadamente
Los prados del Cervunal y su refugio nos esperan con el sol aún alimentándolos
Interior del refugio. Estamos indecisos, no sabemos si quedarnos allí o seguir descendiendo hacia la Garganta de Gredos para pasar la noche en otro refugio. Llegan más montañeros con la idea de pasar la noche para ascender al día siguiente.
Decidimos partir ya que el refugio es pequeño y no hay sitio para todos
Es difícil dejar de fotografiar esta montaña
Para el regreso no tomamos el camino de la idea, sino que nos dirigimos hacia la loma soleada y por la zona clara de vegetación que se distingue al frente seguir unos hitos que nos guiarán hacia la Garganta de Gredos
Parte alta de la garganta. Nosotros vamos hacia el otro lado, así que abandonamos los hitos y por terreno sin senda pero más o menos claro descendemos rápidamente
Como referencia tenemos la cascada que forman las aguas provenientes de los desagües del predo del Cervunal
Así y tras cruzar la Garganta de Gredos por el Puente de Roscenvalles buscamos en ascenso, ya de noche, el refugio del mismo nombre sito en la Garganta de las Pozas (la foto está tomada al amanecer)
Como se ve, los refugios no guardados de Gredos están bastante bien aprovisionados
La Mogota nos saluda al amanecer
Cruzando el puente de Roscenvalles
Aguas de Gredos
Refugio de Labradillos
La Mogota nos despide con un azul vivo y un blanco reluciente
Los prados de la parte baja de la Garganta tienen un bello colorido y son muy agradables para pasear
Navalperal de Tormes en su privilegiada ubicación
Cruzando el puente y las aguas del Tormes pero con mucho más brillo y luz que el día anterior
Mapa de la ruta
Dos tomas en 3D, la primera para apreciar la subida y la segunda la bajada
Perfil de la ruta
El primer día hicimos unos 18 kilómetros con 1400 metros de desnivel acumulado de subida y 1100 metros de bajada. Los tiempos de marcha, 45 minutos desde el inicio hasta la bifurcación de caminos donde se toma la cuerda de las Peñas; desde aquí al chozo del Cervunal 2 horas; desde éste al collado 1 hora; y desde el collado a la cumbre entre 30-45 minutos según lleguemos de fuerzas. En la bajada 1 hora hasta el prado del Cervunal y 1 hora y 15 minutos hasta el refugio de Roscenvalles.
El segundo día apenas unos 8 kilómetros con unos 300 metros de desnivel de bajada en 2 horas .
Enlace al track:
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=6208892
